jueves, 14 de julio de 2011

Dueña de Sevilla...

Emblema de la ciudad, templo árabe cristianizado, buque insignia del casco histórico de Sevilla y dueña del cielo que reina en nuestra Híspalis... No es más que el antiguo alminar de la mezquita almohade que la convirtió siglos después en el campanario de la Catedral.

Las vistas que ampara el Giraldillo, encubren desde las azoteas sevillanas del barrio de Santa Cruz, hasta la Torre del Oro, el río que separa a la ciudad en dos, y el puente de Triana que vuelve a unificar a la ciudad en una misma, con dos almas de distintos sentimientos.

Pasó a ser Patrimonio Nacional en 1929, y cincuenta y ocho años después la proclamaron Patrimonio de la Humanidad.